Ricardo de León
Quienes hemos participado en cursos de primeros auxilios habremos escuchado que en un accidente, si requerimos una ambulancia debemos señalar a una persona en especial y a ella pedirle de manera puntual y directa que consiga una ambulancia, ya que de no hacerlo así, no importa cuántas personas puedan estar cerca, lo más probable es que nadie tomará la responsabilidad de conseguir la ambulancia.
Lo mismo sucede en otras áreas de nuestra vida, cuando no definimos de manera clara qué esperamos, de quién lo esperamos y cuándo lo esperamos, y en consecuencia no obtenemos lo que esperábamos.
El libro “The tipping point” nos muestra un caso que sucedió en 1964 en New York, donde Kitty Genovese fue perseguida y atacada 3 veces durante media hora en la calle mientras 38 de sus vecinos veían por sus ventanas y ninguno de ellos llamó a la policía. El hecho fue estudiado por Bibb Latane y John Darley de la Universidad de Columbia; uno de sus experimentos consistía en dejar a una persona sola en un cuarto donde otra persona tenía un ataque epiléptico y descubrieron que cuando sólo había una sola persona testigo del evento epiléptico acudía en su ayuda un 85% de las veces, pero cuando habían 4 testigos del episodio la tasa de ayuda bajaba al 31% demostrando que conforme las personas están en grupos la responsabilidad de actuar es difusa; es más fácil que se asuma que alguien más hará lo que se debe de hacer.
Bien dicen en Calidad que debemos definir lo que en Inglés se conocen como las 5W+H
What = Qué
Where = Dónde
When = Cuándo
Why = Por qué
Who =Quién
How = Cómo
Si en una meta u objetivo de tu vida laboral o personal no tienes claramente estos puntos, corres el riesgo que la meta u objetivo se pierda o no se lleve a cabo como lo pensabas o esperabas..
¿Qué opinas?
Fuente: http://ricardodeleon1961.wordpress.com
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