LA CARTA DE DIOS...♥

Por: Nik Helbig

¿Qué buen amigo no se preocupa por los que ama? Era aquel que conocía mil amigos (y bien que los conocía) y poseía millones de conocidos. Poseedor de un gran amor, el cual repartía por doquier sin pensar y escatimar. A veces se lo devolvían y a veces no. Siempre pendiente de todos (hasta de tí) y atento a sus sentimientos y realidades. Viendo a aquel de su agrado,  -a aquel que sí le devolvía el amor que él le daba- lo notó un tanto raro y triste y decidió escribirle, ya que hace mucho que no estaban en contacto:

Para ti mi querido amigo:

Sentado a la postra de tu ventana viendo lo que ocurre, lo que sucede allá afuera, a esa corta distancia de ti, y tú, sentando observando. Las estaciones van y vienen, la lluvia cae y se evapora, las aves vuelan y tú, sentando viendo. Viendo y pensando como fuese todo si estuvieses allí. Pensando como fuese el mundo si tu materia anduviera por ahí ocupando espacio, ser el cubo de hielo que cambia el volumen de agua en el frasco. Y tú, sentando y no te mueves. ¿Por qué? ¿Qué hay en tu mente que te impide ir? ¿A qué le temes? Preguntas que tú mismo te haces en tercera persona y las dejas flotando en el aire sin una respuesta. Yo te las puedo responder, quizás no te guste la respuesta,  pero sé que sentirás que tengo la razón. Estas ahí sentado porque tienes miedo de no cumplir las expectativas que te has propuesto por la domesticación formalizada de la sociedad en que vives. Tienes miedo a fracasar y de no llegar a ser quien quieres ser. ¿Y quién quieres ser? Quieres ser aquel que llame la atención, aquel que llene el vaso de agua de los demás, pero no te das cuenta que andarás con tu vaso vacío toda tu vida, hasta que ésta sucumba. Creo que debes salir y ver la ventana desde afuera. ¡Corre y llena tu vaso! Antes de que el agua escasee. ¡Se tú! Busca tu felicidad y cambia el mundo. Se materia que ilumine y haga vibrar tu alrededor. Controla tu mundo. No permitas que caminen junto a tí aquellos que atentan contra tu felicidad. No busques ser quien “quieres ser”, sino, busca SER quien te haga feliz. Para eso tienes el don de la vida, utilízalo a tu favor.

Sinceramente, tu amigo, Dios

Dios, ese SER inigualable, esa energía, ese ser a veces malinterpretado e ignorado. Siempre observa, siempre está pendiente, siempre sabe que sucede, siempre sabe el porqué, siempre sabe la solución, siempre sabe lo que piensas, sabe lo que es necesario, lo que está demás, lo que hace falta, lo que debes tener… Simplemente, sabe quién eres. ¿Por qué no buscar y seguir lo que sientes en tu interior? ¡Si para eso estas aquí! Para ser feliz, eres semejante a él, posees voluntad para amar y sabiduría para comprender. Toma oportunidades, siente tu alma, su voz que es tu consciencia. Síguela, y más que todo, dale a Dios lo que quiere y necesita, corresponde su amor.

Por: Swami Tadatmananda, monje de la Orden Ramakrishna

VÍA YO EVOLUCIONO