Podría escribir mil veces que te extraño y quizá me faltarían otras mil y mil más, también podría gritarle a la noche que me dueles, así lenta y profundamente, podría decir que en su momento reclame al destino haberte cruzado en el mío, me recriminé el haberte permitido el ingreso a mi existencia, sin embargo, me di cuenta que tu presencia me recordó que estaba viva.
Si, en mis ojos sembraste esperanza, en mi mirada agregaste colores, y eso sin duda se agradece, me recordaste lo que es vibrar, que había una parte del corazón que no estaba ocupando….duele?, si, un poco, la ventaja es que, a diferencia del pasado, hoy soy feliz conmigo misma, se que estoy completa, que me siento plena, sola o acompañada, y eso lo reconocí en el momento que partiste.
Así las cosas no puedo más que desearte un camino lleno de luz, que un día por la vida encuentres a alguien que llene tu mirada, que ilumine tu sonrisa, que fortalezca tu alma, alimente tus sueños y te acompañe en tus metas.
De mi?, sé que estaré bien, que seré feliz porque lo soy ahora, que en algún lugar, en algún momento ese “alguien” con el que he de compartir los sueños y la vida y la muerte aparecerá…que mientras yo sigo siendo una idea incompleta, una frase no terminada, una historia que se sigue escribiendo…
VÍA YO EVOLUCIONO
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