Al explorar primero dónde creemos que no somos poderosos, podemos luego conectarnos con el lugar donde reside nuestro poder como individuos. Las preguntas más expansivas que podemos hacernos como seres humanos, y a menudo las primeras preguntas que nos hacemos cuando empezamos a despertar son: “¿Quién soy?” “¿Cuál es mi misión?” “¿Cómo puedo convertirme en/expresar mi ser superior?” “¿Por qué estamos aquí?” “¿De qué se trata este planeta?” Una de las cosas más conmovedoras de descubrir es que limitamos nuestra propia capacidad de ver las respuestas a aquellas preguntas mediante restricciones energéticas, mentales, emocionales y perceptivas. Nos RESTRINGIMOS a nosotros mismos. ¿Y por qué lo hacemos? Al menos por dos motivos: uno es para poder jugar juegos limitados, dentro de parámetros limitados; y el segundo es por temor a que si nos liberamos de toda restricción, lastimaremos a otros.
Todas esas restricciones reflejan el miedo que le tenemos a nuestro propio PODER personal.
¿Qué es el poder?
El poder es la capacidad de hacer, y es CHI. Cuanta mayor es nuestra capacidad, más Chi, más “poderosos” somos. Tanto en nuestra propia vida como en la sociedad en general. Como ejemplo, el dinero es un representante del Chi y de la capacidad de hacer. Si tuvieras 20.000 millones de dólares en el banco, ¿podrías hacer más de lo que puedes hacer ahora? Esto le quita al dinero de todas las envolturas y falsedades con las que ha sido manchado y lo restablece a su función más simple: representación de poder (chi y capacidad de hacer). El programa de auto gratificación frente a empoderar nuestra experiencia colectiva es muy prominente cuando observamos lo que haríamos con todo ese poder.
Nos enseñan una y otra vez que el poder corrompe, sobre el abuso de poder, que se apoderará de nosotros y nos controlará, que el poder es MALO. ¿Quién nos enseña eso? Gente que tiene poder. Ahora, si en las dos oraciones anteriores reemplazamos la palabra “poder” por la palabra “dinero”, empezarás a tener una verdadera sensación de por qué aceptamos ser desempoderados, incluso en las redes de la “nueva era”: Nos enseñan una y otra vez que el dinero corrompe, sobre el abuso del dinero, que se apoderará de nosotros y nos controlará, que el dinero es MALO. ¿Quién nos enseña esto? Gente que tiene dinero. El hecho es que la relación entre nuestra manifestación de poder, nuestra riqueza, nuestra capacidad de hacer y nuestro Chi suele ser igual a cómo nos sentimos respecto al poder y cómo nos sentimos respecto al dinero. Y eso NO ES UNA COINCIDENCIA. Nos enseñan a temer y rechazar nuestro propio poder, a sentir que el dinero es nocivo desde muy temprano en la vida. Esto nos lo enseña la misma gente que está en posición de poder porque si nosotros nos diéramos cuenta, accediéramos y usáramos nuestro poder, su poder quedaría expuesto por lo que es: nada más que humo y espejos. Esa misma gente ha creado un modelo financiero que no es nada más que humo y espejos que desvía todo el chi, el dinero y el poder directamente hacia ella.
¿Quién es esa gente?
Todos los seres a quienes les has dado autoridad sobre ti. Todo aquel que pueda decirte qué hacer y que tú lo hagas aunque no lo sientas correcto. Todo aquel a quien le hayas otorgado la capacidad de quitar cosas de tu vida sin tu “consentimiento”, como puede ser un empleo, electricidad, agua, refugio, alimento, comunicación, amor, comodidad, alegría… Todo aquel que sientas como “culpable” de tu sufrimiento, dolor, angustia o del sufrimiento, dolor y angustia de otros. “Ellos” son nuestra PROPIA creación para evitar que seamos poderosos. Es como un bucle que se autoalimenta.
Entonces, ¿dónde reside TU PODER?
Allí donde tu curiosidad, alegría, inspiración y pasiones se encienden. Una combinación de aquello que haces bien y aquello que te encanta hacer. Mira a tu alrededor en la habitación donde te encuentres ahora, o si estás en un lugar público, mira tu ropa, lo que tienes en los bolsillos, mochila, cartera u otros objetos personales. Mira el historial de tu buscador en tu programa de internet. Habrá temas que sobresalgan. Un color, un estilo, un período histórico, una tecnología, una pregunta, una teoría, una destreza, habrá algo más prominente que lo demás. Para nombrar uno, el interés que tienes en tu propia consciencia expandida (ascención) y crecimiento. Estás aquí para ESTAR despierto. Ahora mira a la gente con la que te rodeas en tu vida personal. Aquellos con quienes compartes la mayoría de los mensajes, correos electrónicos, conversaciones, tiempo. Ellas son las personas que te están reflejando la realidad que estás creando, el poder que estás usando y, muy importante, el poder que estás suprimiendo. Toma todas las comunicaciones que has tenido con esos individuos principales en los últimos cinco días. Analiza los temas que abordaron, las palabras que tú y ellos utilizaron más y la dirección principal de la energía (¿elevaba tu vibración y la de ellos o la disminuía?).
Ahora bien, esta parte del ejercicio es interesante: imagina a todos esos individuos teniendo poder absoluto sobre la realidad. Teniendo poder y chi ilimitados. Así tendrás una idea muy gráfica de dónde reside tu propio poder y de dónde estás restringiendo tu poder.
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