sábado, 23 de noviembre de 2013

Uno a uno a uno entren en el Portal 11.11....por Gillian MacBeth-Louthan






Cuando las fuerzas del once se activan completamente, tienen el poder de cambiar la historia en gestación. El once nos enseña que cada problema llega como una oportunidad divina de aprendizaje. El 11.11 es una iniciación solar. Demandará el cien por ciento de nuestra atención mientras se abre camino a través de nuestro cuerpo, mente y espíritu. Los Números Maestros acentúan los significados de los números de un solo dígito. Son considerados vibraciones de poderosa activación. Simbolizan potenciales puros sin aprovechar que esperan ser controlados por quienes tienen ojos para ver. Los números maestros (11.11, 2.22, 3.33, etc.) llegan para nacer en una nueva línea de tiempo. Este Portal 11.11 ofrece la oportunidad de ir más allá de todas las limitaciones que hayan establecido inadvertidamente para ustedes mismos.

Uno a uno a uno entren en el Portal 11.11.



Acontecimientos Cósmicos Actuales de Gillian: Al llegar al final del 2013, todos miramos alrededor y vemos cómo ha cambiado el panorama de nuestras vidas. No sé qué dirán todos ustedes, pero 2013 literalmente me pateó el trasero en todas direcciones de aquí al domingo. La mayor parte de los días no sé si voy o vengo. Estoy siendo jalada constantemente en tantas direcciones con tantas responsabilidades nuevas que cada sector solo obtiene una pizca de mi atención. Parece haber una pausa prolongada en todas las cosas desde computadoras a teléfonos a canales de televisión y conversaciones. Un momento de silencio mientras las partículas de creación se precipitan a ponerse al día consigo mismas. Al mismo tiempo, la vida y el trabajo y la familia / las relaciones, se han acelerado aumentando sus deseos y necesidades. Se necesita mucha más energía para mantenerse a la par de los tiempos que pasan. Como hamsters, damos vueltas y vueltas tratando de liberarnos por pura fuerza centrífuga.




Como Jodie Foster en Contacto, el tiempo se ha desacelerado tanto que parece que se hubiese detenido, permaneciendo quieto, en pleno punto de apoyo y equilibrado. El diferencial de tiempo está siendo restaurado en todos los relojes biológicos, manteniéndonos latiendo en una nueva dirección. El planeta Mercurio, al estar ahora retrógrado durante unas cuantas semanas, no ayudó con el factor de la comunicación. Con suerte, cuando enderece su propia inclinación, todo estará bien en el mundo.




La mayoría de las personas han estado dando vueltas aturdidas durante días mientras continuamos nuestra travesía 2013, escalando la montaña de basura del ser, moviendo nuestra atención arriba, arriba y lejos de nuestros desechos dimensionales hacia un lugar donde veamos con claridad. En nuestra mueblería parece que estuviésemos filmando una película de zombies, las personas deambulan sin rumbo fijo. Las luces están encendidas, pero ninguno está en su casa. Muchos buscan escapar de este universo holográfico de su mundo personal.





Esta entrada 11.11 es una meseta de seguridad mientras se desencadena el torbellino de las tormentas políticas. El clima se ha convertido en nuestro propio espejo animado mientras luchamos contra los elementos en nuestro interior, esperando que se comprometan en un sentido u otro. Las energías climáticas se reescriben de acuerdo con el patrón del clima del entrelazamiento cuántico.




A medida que los humanos desarrollan nuevas ideas y avances, conductos neurales en el cerebro planetario, este es forzado a un rediseño espacial, como volver a ajustar un reloj universal en el “día fuera del tiempo”. Las refracciones de la Luz Natural muestran a los códigos de repetidores ópticos un nuevo patrón a medida que un nuevo texto en el cielo se despliega para que todos lo vean. Parece haber una profunda tristeza humana al caer lo que alguna vez fue como una larga sombra en un día otoñal.





Los que fuimos alguna vez ya no existen. Literalmente vivimos en medio de lo formado y lo informe. Nuestra conexión con todas las cosas finalmente está aquí, pero parece ser mucho más densa y vasta de lo que pensamos alguna vez. Sentimos y sentimos y sentimos, desde la arena bajo los dedos de nuestros pies hasta la tibia brisa en nuestros corazones. Todo late en un mismo pulso sumamente poderoso, el corazón uno del Creador. Durante eones hemos pedido convertirnos en uno. Un planeta, un corazón, una Luz, un pueblo. ¿Puede la gente de la Tierra asumir la responsabilidad de la Unidad total? ¿Es nuestro corazón lo suficientemente grande como para completar lo que todavía está desgastado en nuestro mundo y nuestra mente?




Todos buscamos conocer lo desconocido, los secretos del universo. Y sin embargo, la mayoría ni siquiera conoce su propio corazón. Libérense de los grilletes de la limitación y tomen vuelo en los vientos del conocimiento fortalecidos por el sol. Su corazón eterno, el corazón del más elevado Creador divino los conducirá en la dirección del fluir perfecto. Únjanse con este conocimiento porque un nuevo nivel de vida que ha sido aislado sale precipitadamente de sus átomos, creciendo con la memoria galáctica de las verdades que han estado latentes dentro de su alma, durmiendo hasta el arribo de una santidad que sobrepasa a cualquier religión.




Este 11.11 en toda su gloria es una iniciación más allá de lo que se puede ver y sentir. Demanda el cien por ciento de nuestra atención a medida que se abre paso a través de nuestras venas y de nuestra vida. En él viven codificaciones bioquímicas que albergan al ADN latente que despierta cuando el reloj marca 11.11. Todos los portales del 11.11 parten en la misma secuencia de tiempo, puesto que el tiempo lineal ya tampoco está ni aquí ni allí.




Este 11.11 del 2013 nos enseña que cada problema llega como una oportunidad celestial para aprender. Nos muestra cómo ver más allá de lo cotidiano y aburrido. Pone a prueba nuestra fe y nuestro sistema de creencias. Nos obliga a escuchar a esa vocecita interior calmada y quieta. Ella nos recuerda que todos somos grandes seres que hemos venido a la Tierra a ayudar con el proceso de sanación y despertar, comenzando con nosotros mismos. Ella les pide que localicen la luz interior y luego solo brillen.

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