Estimados amigos, ahora me dirijo a ustedes para hablarles acerca de las enfermedades karmicas, el karma es una ley cósmica de causa y efecto, a toda acción le sigue una reacción.
Karma es una palabra hindú que significa castigo, se dice que el karma es la mejor medicina; cuando alguien cae en una dolorosa enfermedad, es debido al cumplimiento de un propósito superior que de momento el enfermo no puede comprender, pero cuyo significado posteriormente puede llegar a intuir y a reconocer cada vez más.
Esto significa que si en determinado momento enfermamos es por alguna deuda karmica que tenemos pendiente y es por medio del sufrimiento que experimentamos a través de equis enfermedad que anulamos la deuda, pero a la vez, obtenemos una lección de vida que nos lleva a adquirir madurez espiritual.
Empero no solamente se paga con dolor el karma, ya que es posible negociar con los jueces de la ley divina algunas enfermedades que tengamos por malas acciones pasadas; tal fue en mi experiencia personal cuando ya había pasado la adolescencia y entonces una serie de enfermedades azotaron mi cuerpo físico, entonces terribles calenturas y salpullidos me invadían, los médicos afirmaban que tenía dañada la sangre y que posiblemente me la tendrían que cambiar, para colmo se me complicó con anginas crónicas y ya hablaban de una operación para extirparlas, en esos momentos ya estaba dentro del movimiento gnóstico, resolví negociar el karma con los jueces de la ley divina dando el conocimiento y sin importarme más, me fui a preparar para divulgarlo, ¡He aquí lo extraordinario! las enfermedades desaparecieron con las prácticas y el tercer factor de la revolución de la conciencia que es dar luz al necesitado.
Hoy sé que dichas enfermedades cumplieron con un propósito superior que de momento no pude comprender, pero cuyo significado ahora puedo ver claramente. ¡Amigos!, es preciso saber que el Ego que interiormente cargamos nos hace pagar karma y forma parte de una de las cinco causas de las enfermedades llamada “Ens Dei” por el Maestro Paracelso y citadas por el M. Samael en su libro de Medicina Oculta.
Los agregados psicológicos actúan como verdaderos venenos psíquicos que dañan la parte vital de los órganos de nuestro cuerpo físico enfermándolos irremediablemente.
Por ejemplo, el odio provoca deformidades en la columna vertebral, el paludismo tiene por causa karmica el egoísmo, el yo de la mentira provoca enfermedades en el corazón que pueden llevar a un paro cardiaco, cuantos actores han muerto a temprana edad por fortalecer el yo de la mentira en sus actuaciones, recordemos la frase que dice: “Quien miente peca contra el padre que está en secreto que es verdad”, al mentir falseamos la conexión de la energía de nuestro ser a nuestro corazón, el maestro Samael decía “hay que decir la verdad cueste lo que cueste”, por otra parte, el yo de la mentira provoca fealdad, vean como pintan a las brujas, muy feas y mentirosas.
El cáncer, la ciática y la difteria tienen como causa la fornicación; la tuberculosis y el raquitismo son originadas por el ateísmo y el materialismo, la poliomielitis, la ceguera de nacimiento, la deformación en general de huesos es por haber sido cruel con los animales y con las personas en vidas pasadas: por ejemplo cazadores, toreros y domadores de circo.
La artritis reumatoide en la juventud es por haber sido cruel con sus semejantes, la viruela en la juventud tiene por causa el no saber perdonar, el mal del vitíligo o del pinto es por mala voluntad y envidia, la epilepsia es por haber practicado el mediumnismo en el pasado, la malaria es hija del egoísmo, éstos son solamente algunos ejemplos.
Como pueden darse cuenta, los agregados psicológicos nos llevan al desarrollo de tremendas enfermedades, muchas de estas también se deben a malas acciones de vidas anteriores.
Si hay una epidemia cultural de la demencia y el Alzheimer así como las llamadas enfermedades auto inmunes como el lupus y la esclerosis múltiple, estas enfermedades tienen su origen en el mal uso del intelecto, el ateísmo y el rechazo a la divinidad.
Pero esto no es todo, hoy en día se están creando nuevas enfermedades por diseño a través de nuevos virus y vacunas fabricados en laboratorios que atacan directamente al sistema inmunológico de hombres y mujeres intensificando los karmas.
En la actualidad, las causas del cáncer se han diversificado ya sea por alimentos contaminados, por el daño de la capa de ozono, por el uso de anticonceptivos, por contaminación radioactiva, etc.
Ante un tratamiento inadecuado de las enfermedades, nuestra sociedad convulsiona con el azote de todo tipo de epidemias, así como nuestro mundo Tierra también se trastorna con terremotos y explosiones volcánicas por tener un cáncer encima que es la propia humanidad.
El filósofo austriaco Rudolf Steiner afirma que existe una relación entre los bacilos causantes de enfermedades y el demonio Mammon (personifica la avaricia, la codicia y el materialismo) mismo que sigue teniendo influencia en el siglo XXI; la humanidad le dio la espalda a la enseñanza del Cristo misma que se encauza a una forma social saludable sin egoísmos, ni intereses de unos cuantos.
Es, a todas luces visibles la conexión de Mammon y la posición comercial de ciertas compañías no solo químicas y farmacéuticas, sino todas aquellas empresas y personas que se dedican a engañar y estafar a otros con el objetivo de enriquecerse.
No solo la Ley del karma produce las enfermedades, también son nuestros malos hábitos alimenticios, el abuso de medicamentos, de las drogas, del alcohol, pero sobre todo las emociones y los pensamientos de tipo negativo, como el miedo, la ira, la mentira, la falsedad, el odio, la violencia, etc., que además obstruyen el desarrollo de las facultades internas como clarividencia positiva, telepatía, el desdoblamiento consciente en cuerpo astral, el correcto funcionamiento de nuestro sistema glandular, y otras muchas cualidades.
Cada quien es libre de elegir el método de curación que quiera, el alimento que desee, consumir, la ropa que quiera vestir, etc., sin embargo es conveniente que sepa las consecuencias de todos sus actos, pues no existe causa sin efecto.
No solo debemos pensar en hacer buenas obras sino que debemos actuar, hay muchas maneras de ayudar, y si lo haces de acuerdo a tu vocación será lo mejor. Pero ante todo hay que comprender la situación conflictiva y destructiva que vivimos en estos momentos y que al respecto, nada se puede eliminar con tratados de paz, con procedimientos intelectuales, como hasta ahora se ha hecho, sino con una transformación radical de la humanidad, porque lo que somos es la familia, es la sociedad, es el gobierno, es la humanidad en conjunto.
Virgilio Cuautle Roldán. Instructor de Nochistlán, Zac. México
Imagen: Muro de Cráneos. Chichén Itzá, México, tomada Martha Rodríguez Licea
Quien quiera descubrir las Leyes de la Naturaleza, debe encontrarlas dentro de sí mismo. Quien dentro de sí mismo no encuentre lo que busca, no lo encontrará fuera de sí mismo jamás Samael Aun Weor.
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