De la Kabbalah… por Yehuda Berg
Todas tus relaciones son arterias espirituales que pueden bloquearse cuando actúas con intolerancia. Cada vez que interactúas con alguien en tu vida, sin importar quien sea, afectas los canales en tu vida y en el mundo.
Cuando no eres muy agradable, creas depósitos de grasa. Si estos bloqueos continúan creciendo y siendo ignorados, el “mal-estar” se declara y los negocios no marchan tan bien como antes, la llama del romance se desvanece, los niños van encaminados por la vía equivocada…
Tómate un momento para absorber esta lección. Ultimadamente, es tu comportamiento lo que determina si tus arterias espirituales gozan de buena salud o sucumben al sufrimiento. Y no se trata de ser agradable con las personas que admiras. La verdadera prueba es cómo tratas a las personas a quienes no estimas.
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