Lo primero que haces al despertar es mirarle.
Compruebas que sigue ahí, a tu lado, y suspiras de alivio.
¡Comienzas un nuevo día con él!
Es
tan maravillosa la vida con él... Te hace reír, te hace llorar... Te
susurra al oido historias extraordinarias, y también te cuchichea esas
pequeñas historias cotidianas. ¡Conoce el mundo mejor que nadie! Tiene
buena memoria para esas cosas que te importan: el cumple de tu amigo, la
peli que dan en tu cine favorito, o cuanto cuesta el menú en ese
restaurante vegetariano.
Casi no puedes creer
que paséis tanto tiempo juntos. Las horas pasan volando... ¡Ay, el
amor...! Porque si eso no es amor, ¿qué podría serlo? Ayer estuviste
cinco horas mirándole, y hoy ya llevas seis. No te cansas de él, es
inaudito. Y eso que estáis juntos desde hace cuatro años...
Junto
a él cantas, bailas, saltas y corres. Tiene esa increíble capacidad de
compartir tus mejores momentos, y lógicamente le dedicas tus mejores
sonrisas. Es normal que siempre estés pendiente de que se encuentre
bien, de que esté bien alimentado, de que no se dé un golpe. ¡Realmente,
ya no sabes si podrías vivir sin él!
Él se llama "teléfono móvil"
VÍA EL BLOG INTEGRAL
No hay comentarios:
Publicar un comentario