Esta semana entramos en el mes de Sagitario, el mes de la Luz y la expansión. Sagitario es uno de los dos signos gobernados por el planeta Júpiter, el cual es el planeta más grande del sistema solar (de hecho, es cerca del doble en tamaño de todos los otros planetas combinados). Por ende, no ha de sorprender que este planeta traiga la energía del progreso, la visión y la energía para ensanchar el área de influencia.
Dado que Sagitario es un signo de aprendizaje y crecimiento, las personas nacidas bajo este signo son generalmente pensadores, escritores y eruditos. Por ejemplo: Mark Twain y George Elliot son ambos amados sagitarianos. Con una apreciación por las personas y los animales así como una franqueza simple en su acercamiento hacia las situaciones, los sagitarianos tienden a llevar cierta ligereza en la forma en que navegan a través de la vida. Sin temor a expandir sus límites o ir a donde otros no se atreven, los sagitarianos aman y prosperan en la libertad y la aventura.
En este mes, cada uno de nosotros podrá traer esta energía de expansión a nuestras vidas para forjar una nueva dirección para nosotros. En comparación con el mes pasado, el cual pudo resultar un poco pesado y desafiante, Sagitario será como un placentero respiro de aire dulce. Si estamos abiertos a ello, cada día de este mes será un terreno de cultivo para el cambio. El cosmos nos apoyará al acercarnos a las áreas de nuestras vidas que usualmente dejamos sin tocar. Tendremos la habilidad de decir a nosotros mismos: “He tenido suficiente de esta preocupación, esta adicción, esta limitación… ¡Quiero transformarme!”. Estaremos apoyados durante este mes para convertirnos en “agentes libres”, menos esclavizados por los temores y las dudas que usualmente nos mantienen atados.
Así que, ¿cómo llegamos a ese punto?
Primero que todo, necesitamos entender que lo único que puede bloquear nuestra expansión es nuestra propia negatividad, esa visión de túnel creada por nuestro Deseo de recibir para sí mismo individual. Hasta que despertemos al hecho de que en este universo existe una batalla de conciencia continua, una batalla sobre poder restringir el Ego, nunca podremos salir de este túnel. Sin importar cuánto intentemos leer o estudiar, si no nos aventuramos en lo desconocido, a pesar de nuestros temores, nunca alcanzaremos nuestro siguiente nivel de espiritualidad.
Así que cada día de este mes, vamos a enfocarnos en desviar la energía lejos del “yo”. Cuando queremos darnos por vencidos ante las presiones y los desafíos del día, podemos encontrar una forma de hacer algo por alguien más. Recordemos también que si queremos compartir felicidad hacia el exterior, primero necesitamos ser felices en el interior. ¿Alguna vez has escuchado sobre la Terapia de risas? Muchas personas se sientan en una habitación y se ríen entre ellos. Eso es todo. Parece tan simple pero es sorprendente cómo puede cambiar la energía en una habitación. Ahora, no quiero decir que tenemos que hacer esto todos los días, pero lo que digo es que hay muchas pequeñas cosas que podemos hacer durante el día para expandir nuestra energía y así compartir con otros.
Este mes también tenemos que recordar mantener en mente que el trabajo espiritual no siempre es tan fácil. Siempre tiene que haber algún tipo de lucha. Esto no quiere decir que debemos ir a casa y golpearnos en el pie con un martillo. Lo que quiero decir con esto es que cuando nos confronten los problemas (situaciones incomodad, mucho trabajo, un jefe o una pareja molesta) tenemos que recordar que todos, cada persona en este planeta, tiene una chispa del Creador dentro. Todos somos partes de esas pequeñas velas que parpadean, se queman y se apagan. Qué tan fuerte brillarán nuestras velas depende del esfuerzo que pongamos en encender las velas de otros y en cuán decididos estemos por luchar contra nuestra propia negatividad. Porque si realmente nos comprometemos en esta batalla de conciencia, nada ni nadie puede apagar nuestra llama.
Karen Berg
No hay comentarios:
Publicar un comentario