Nuestras relaciones de pareja evalúan la capacidad de medirnos a través del otro. En ellas traspasamos la frontera de nuestra propia piel para entrar en relación con otro semejante.
Hay personas que creen tener “algo raro” que les impide gustar a los demás. Lo más precioso de ser humano es nuestra diversidad. Como no hay dos copos de nieve iguales, tampoco hay dos seres humanos iguales.
En lugar de acomplejarte por tus diferencias, empieza a valorar en positivo aquello que te distingue de los otros y saca partido de todos tus dones para amar.
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Le instalaron el miedo a lo de afuera repitiéndole una y otra vez: “La pareja es lo más difícil que existe, no vale la pena ni intentarlo.”
Construyó la síntesis de su trauma, no sentirse con derecho a tener pareja, en base a tres pilares: humillación, indignidad y obsesión.
VÍA PLANO CREATIVO
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