Preferimos seguir con nuestras cómodas vidas y seguir compadeciendo a esos pobres negritos que se mueren de hambre en África. Preferimos pensar que no vamos a ayudar económicamente porque andamos muy justos de dinero mientras nos comemos una tapa en el bar de abajo.
Y en esas estamos.
Y encima votamos a nuestros políticos para que nos aseguren nuestro estado de bienestar sin ni siquiera importarnos qué porcentaje del presupuesto económico dedican nuestros gobiernos a temas solidarios con los más necesitados, aquellos que se mueren de hambre mientras los buitres acechan a su alrededor.
Y encima vamos a sus países a sacarles fotos y grabarlos con una cámara para que podamos compadecernos de ellos mientras preparamos el desfase alimenticio de Navidad. Una compasión hipócrita.
¿Cambiará algún día todo esto?
No lo sé. Perdonadme que me voy a preparar la cena.
de RECURSOS DE AUTOAYUDA
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