La fidelidad a la que el poder y la religión han empujado a La Mujer,no es otra cosa que la de "convertirse" en DEMASIADO BUENA, para dejar de ser "pecadora".
Las Mujeres "demasiado buenas" todo lo perdonan...
Callan, esperan, obedecen abnegadas a un relato artificioso.
Confianza, Libertad y Poder no están en la lista de atributos con los que ha de cumplir una "Buena Mujer"...
Las Mujeres NO somos un premio, No somos una mascota, No somos una meta a alcanzar o una madre a quién sustituír.
Las Mujeres que persiguen a un hombre seguirán ahuyentándolo.
LA MUJER MAGIA no obedece otro Poder que no sea El Propio
y así todo lo convierte en un Inspirador Deseo a Vivir.
LA MAGA
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