"En los caminos de la vida tenemos dos guías: la sabiduría y el
amor. Debemos aprender a trabajar según las leyes de la
sabiduría y los métodos del amor.
La sabiduría y el amor pueden ser comparados a las manecillas de
un reloj: la sabiduría es la manecilla pequeña que marca las
horas, y el amor la manecilla grande que marca los minutos.
Gracias a la sabiduría elegimos una orientación, un programa
para realizar, válido para la eternidad. Pero para realizarlo
debemos adoptar los métodos del amor, es decir vivir cada minuto
con alegría y entusiasmo, sin perder jamás nuestro impulso. Es
así como conciliamos el programa del día con el de la eternidad.
La sabiduría muestra en qué dirección debemos ir y el corazón
mantiene el movimiento."
Omraam Mikhaël Aïvanhov
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