PARA AJUSTAR EL ALMA

Cuando la cuerda del violín se estaba ajustando,

sentía el dolor de ser estirado,

pero una vez que estaba en sintonía,

entonces sabía porqué se estiró.

Lo mismo ocurre con el alma humana.

Mientras que el alma pasa por el dolor, la tortura y los problemas,

se cree que habría sido mucho mejor si hubiera pasado por la vida sin ella.

Pero una vez que alcanza la culminación de la misma,

entonces, cuando se mira hacia atrás,

comienza uno a darse cuenta del porqué de todo

que estaba destinado sólo para ajustar el alma a un tono determinado.

Tagore