La Meditación no es un fin, es un medio para establecer un puente entre ego y Alma.
La Meditación puede ser “con semilla” ó “sin semilla”. La Meditación “sin semilla” encaja mejor en Oriente, se basa en dejar la mente en blanco. La meditación “con semilla” se aconseja en Occidente. La “semilla” puede ser: un Mantram, observar un Mandala, una Danza (Tai-chi, Derviches). Todas las Danzas Sagradas son Meditaciones en movimiento, o puede ser una Idea ó Arquetipo (el Amor, la Libertad, etc.), o un Pensamiento de Luz: Omraam Michael Aivanhov, proponía dos: “Ser un Instrumento en manos de la Divinidad” y “Llevar el Cielo a la tierra”.
Cualquier Técnica Meditativa posee Cuatro Fases:
- Concentración: sobre algo elevado, bello, ideal
- Meditación: alagar la concentración
- Identificación: alargar la Meditación fusionándose con el motivo de la fijación de la mente.
- Contemplación: comunión con la Vida Una.
Eva Monferrer
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