Pregunta:
¿Cómo puedo conseguir el dinero que necesito para algo?
Respuesta:
La realidad que percibimos es reflejo de nosotros.
La conciencia está experimentando la vida desde un punto de vista, el tuyo, el mío, el de la otra persona, etc.
Cada persona tiene un programa de partida, unas experiencias programadas.
Cuando la conciencia experimenta un patrón de pensamiento limitante (no puedo, no soy capaz, no tengo dinero, no me quieren…), te sientes mal. Cuando lo superas y te sientes más conectado a los demás, más abundante (sí puedo, soy maravilloso, he recibido justo lo que quería, cuánto amor hay en mi vida…), te sientes bien.
Primero la conciencia pasa por un punto de ti y luego crea una experiencia que te permita sentir dónde estás. Es así y no al revés. Cuanto más relajado observes la experiencia, antes y mejor pasará. La experiencia no tiene vida propia, es un reflejo del punto en el que te encuentras.
No podrías experimentar estar bien si no hubieras experimentado antes estar mal.
Entonces, con el dinero…
El dinero que recibes es una forma de manifestar que la conciencia está experimentando el paso por un punto ligero, positivo, respecto a un deseo. Primero deseas algo que no tienes como expresión del paso por una limitación, y recibir apoyo económico es la expresión de la superación de una limitación.
Hay que recordar que cuando deseas algo que no tienes, cuanto más tiempo te entretengas preocupándote por las limitaciones, más tardarás en salir de la limitación.
También hay que recordar que el dinero es una forma de expresar que has superado la limitación que sentías como deseo de algo que no tienes. Eso implica que si no confías en el proyecto concreto, o no confías en ti, quizás no te llegue nunca el dinero para realizarlo, o te llegue el dinero pero aparezcan otras trabas.
En resumen y poniéndote manos a la obra:
1. Tienes que conseguir enfocarte en lo que sientes y no en lo que está pasando (actitud meditativa en medio del problema).
2. Relájate y observa cómo la turbulencia, dolor, sufrimiento se va desvaneciendo.
3. Cuando te sientas mejor, reflejarás una realidad mejor.
4. Estos tres pasos, aplicados siempre que te sientes mal (preocupado, enfadado, cansado…) contribuyen a reflejar una realidad que apoya tus deseos. No vale con trabajar el tema “dinero” sin trabajar otros temas como: poca autoestima, exigencia, preocupación por la carencia de tiempo, etc.
5. Todos estos temas no hay que forzarlos. Espera a que la vida te muestre que la conciencia está experimentando una limitación (lo sabrás porque te sientes mal), y entonces aplica los tres primeros pasos.
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