¡Abre tus alas! Suelta tus apegos y expectativas de lograr ciertos resultados. Acepta las cosas tal como son y se presentan. La única manera de lograr esto es observar la vida con la curiosidad de un niño, libre de juicios y opiniones. Fluirás con las aguas del río de la vida y comenzarás a vivir MILAGROS. Existirás en una mágica sincronía en la que ocurren las cosas más increíbles.
MABEL KATZ
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