Ya estamos
en la Luna Llena en Sagitario del año, esta vez acompañada de los
increíbles Quirón, que forma una T-cuadrante al Sol y la Luna, Y Folo
que se encuentra junto a la Luna y además alineada al Centro Galáctico,
ese agujero negro, fuente de extraordinaria energía, que se encuentra a
26º de Sagitario.
Esta
lunación en el ángulo Géminis-Sagitario coincide (ocurre al mismo
tiempo) con la cuadratura (90º), exacta por última vez en estos días,
entre Marte en Libra y Plutón en Capricornio, que todavía forman la
gran cruz cardinal con Urano en Aries y Júpiter en Cáncer, aunque este
último se aleja cada vez más de ella. De
todas maneras todavía estamos siendo confrontados con los temas que
tengamos pendientes y de una manera bastante urgente. Los ánimos se
disparan y los temperamentos también. Esto, unido a este proceso de
Mercurio Retrógrado que nos impulsa a concluir temas incompletos, a
revisar nuestras cuentas bancarias, nuestras comunicaciones, nuestras
relaciones laborales, nuestros estudios, etc, puede convertirse para
cierta gente, especialmente todos aquellos con planetas en signos
mutables : Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis en una aceleración de
eventos que nos fuercen a tomar decisiones que hubiésemos preferido
postergar. Tiempo de pensar antes de hablar, pues lo que digamos puede
ser seriamente malinterpretado o simplemente provocar reacciones que no
nos gustaría confrontar. Así que a respirar profundo y pensar nuestras
palabras antes que salgan de nuestra boca. Este es un buen ejercicio
para el alma, y sobre todo, pues la interacción entre Marte y Plutón nos
hace entrar en guerras de poder a las que no vale la pena sucumbir. Es
mejor esperar y decir las cosas de una forma más inteligente y menos
desde la ira. Todo aquel que nos lleva a la ira, nos está sirviendo de
espejo, para temas muy profundos que nuestra alma debe aprender a
manejar.
Lo que me
trae a Quirón que para esta lunación se encuentra formando una
T-cuadrante a la Luna y el Sol, y Folo que se encuentra en conjunción a
la Luna y por ende en oposición al Sol, es decir alineado con la Luna
Llena. Quirón queriendo iluminar donde se encuentra nuestra herida
abierta, aquella que no nos deja estar enteramente feliz, aquella que
necesita que se la cuide y se la cure regularmente, como si de crónico
esguince se tratase. Tanto Quirón como Folo, nos hablan de ello, aunque
este último quizás se refiere más a esa herida ancestral que acarreamos
injustamente , aquella que es el legado de nuestros antepasados y que
debemos traer a la consciencia para poder hacer algo al respecto. Una de
las cualidades más fascinantes para mi, de estos dos centauros, es el
hecho que si bien grandes injusticias ocurren en sus vidas, ninguno de
ellos son víctimas. Quirón, por ser hijo de un Titán era inmortal, y a
pesar de estar herido se las arregla para vivir una vida llena de
servicio y aprendizaje y es él que decide cuando morir, y Folo, quien
no era inmortal, en cierta forma muere, por abrir la tinaja que contenía
el vino, guardado por generaciones y puesto a su cargo por Dionisio.
Ese jugo ancestral, cuidadosamente guardado bajo tierra, nos habla
también de lo que yo llamo, “la locura familiar”, ese tema perenne que
se pasa de generación tras generación y que sólo aquel que se atreve a
“abrir la tinaja” y traerlo a la consciencia, tiene la posibilidad de
transformarlo. Normalmente la persona con Folo en su carta natal en
conjunción a las luminarias o al Ascendente, es quien “abre la tinaja”,
de alguna forma, tomando consciencia del legado ancestral para poder
finalmente transformarlo.
Venus en
Tauro, forma una oposición a Saturno en Escorpio, para esta Luna Llena,
forzándonos a confrontar nuestros valores y nuestros límites, qué es
aquello que podemos hacer y qué es lo que no. Qué necesitamos en el amor
y qué sacrificios debemos hacer para lograr lo que queremos. Los
últimos asesinatos de niñas y mujeres jóvenes en varias partes del
mundo, por diferencias religiosas y las famosas historias de “honor
familiar”, nos recuerdan que todavía hoy, las mujeres seguimos siendo
violadas y asesinadas por historias culturales y religiosas que parecen
justificar estas matanzas. Y nosotros qué hacemos al respecto? Qué
podemos hacer? Por lo menos sabemos lo que NO debemos hacer y eso es
Callarnos. Y aquí se reina Nessus, el otro centauro, quizás menos
apegado a los mortales que Quirón y Folo. Nessus es un violador que
además no se arrepiente. Nessus se mueve entre la órbita de Saturno y
llega a pasar la Plutón. Nos recuerda el mito de Hades y Persefone, de
la joven violada y forzada a vivir en el Submundo, excepto que Nessus,
viola a la mujer de Hércules y en venganza antes de morir de la herida
de una de las flechas del héroe, le dá un poco de su sangre envenenada a
la mujer de éste, diciéndole que cuando dude de la fidelidad de su
marido, eche un poco de esta mezcla en su ropa, lo que causa la muerte
del famoso Héroe.
Lo más
extraordinario de Sagitario desde mi punto de vista es esa fascinación
con culturas diferentes, la necesidad de comunicarse con los que son de
otras tierras, de otras mentalidades. Sagitario nos habla de nuestras
idiosincracias, de nuestras creencias, nos conecta con la necesidad de
aprender, de aceptar lo diferente, de abrir nuestros horizontes a la
inmensa varieda
VÍA LUZ ARCOÍRIS
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