El cielo no está en ninguna otra parte, ni tampoco el infierno está en ninguna otra parte. Está dentro de ti, ambos están dentro de ti. Tú los creas. Pero la gente sigue haciendo estupideces.
Hace sólo unos días, un hombre me escribió una carta: "¿Qué está sucediendo?" Ha cambiado de mujer cuatro veces. Ésta es la cuarta vez que se ha casado, ésta es la cuarta mujer con la que está viviendo. Y ahora dice: "¿Qué sucede siempre? Al principio todo parece tan hermoso, y en menos de seis meses vuelve a ser lo mismo otra vez". Volverá a suceder lo mismo, porque tú eres el mismo. Y hay complejidades.
Por ejemplo, estás harto de tu mujer; la mente siempre está anhelando lo nuevo, algo nuevo, sensacional. Ya tienes muy vista a tu mujer, conoces toda su topografía. Ahora que conoces su geografía, no queda nada por explorar. Te interesas por otra mujer. Cuando te interesas por alguna otra mujer, tu esposa empezará a crearte más dificultades. Al ver que ya no estás interesado por ella, sino en otra, surgirán los celos. Creará muchas dificultades: te dará la lata, se pondrá desagradable, y cuanto más te hostigue, más repulsión sentirás por ella.
Observa el círculo vicioso: quiere que estés con ella, pero todo lo que hace te está alejando con repulsa. Se volverá cada vez más posesiva y más celosa, y la vida en casa se volverá imposible. Será un infierno. La evitarás todo lo que puedas. Trabajarás hasta tarde en la oficina; incluso si no hay trabajo, seguirás sentado en la oficina, porque ir a casa significa enfrentarte con tu mujer, y de nuevo la misma desdicha. ¿Y qué quiere realmente? Quiere que estés con ella. Pero todo lo que está haciendo es justo lo contrario: te está ahuyentando. Y cuanto más te ahuyente, más hermosa, más fantástica parecerá la otra mujer. Cuanto más hermosa y fantástica parezca la otra mujer, más querrás estar con ella y más querrá ella estar contigo. Y pronto te empezará a decir: "Deja a la otra mujer si quieres estar conmigo".
Pero ella no sabe que la belleza que el hombre está encontrando en ella desaparecerá en el momento en que deje a la otra mujer, porque el noventa por ciento de la belleza que él está viendo en esta mujer depende de la otra mujer. Ella piensa que la otra mujer es el enemigo, pero no lo es. De hecho, es debido a la otra mujer por lo que este hombre se ha enamorado de ella. Son cosas inconscientes. Semillas que no ves y siguen operando. Y ella se sentirá muy feliz. Y cuanto más feliz se sienta y más quieras estar con ella, más fea te parecerá tu mujer en comparación. Pronto querrás vivir con esta otra mujer para siempre. Dejas a tu mujer, empiezas a vivir con esta otra mujer. El día que dejas a tu mujer, ha cambiado todo el contexto: ahora estarás con esta otra mujer, pero no te parecerá tan hermosa, tan atrayente. La hipnosis empezará a desaparecer, porque no hay nadie más que te repela.
En menos de seis meses, la hipnosis ha desaparecido: esta mujer es como era la otra. Ahora que has explorado la geografía, has acabado. Y la mujer no puede creer lo que ha sucedido: "Este hombre estaba tan enamorado. ¿Qué ha pasado?". Lo destruyó ella misma. Y este hombre no puede creer lo que ha sucedido: "Esta mujer era tan increíble, y ha resultado ser tan corriente". De nuevo el movimiento, el mismo movimiento, el mismo círculo vicioso con la misma semilla en lo profundo del inconsciente: él empezará a enamorarse de otra. La gente se enamora y se desenamora inconscientemente. Sigue cambiando de pareja, pero no se cambia a sí misma. Sigue cambiando el exterior pero sigue siendo la misma...
Toma consciencia. No necesitas cambiar el lugar, no necesitas cambiar el tiempo, no necesitas cambiar nada externo. El exterior es todo lo perfecto que puede ser. Sólo hay una cosa que tienes que hacer: tienes que volverte más consciente, más alerta, más despierto, más vacío, para que no haya nada que proyectar en el exterior. Tienes que quemar todas las semillas dentro de ti, tienes que quemar todo el molde dentro de ti. Una vez que has quemado el molde, que has quemado las semillas y has sacado todo lo que estaba dentro y estás vacío, entra en ti algo del más allá, el paraíso penetra en la tierra, y ése es el momento de la transformación.
Con este cambio, toda la existencia es totalmente diferente. La misma mujer, los mismos hijos, la misma gente, la misma oficina, el mismo mercado; pero ya no es lo mismo porque tú ya no eres el mismo. Éste es el camino correcto de la transformación: no empieces nunca desde el exterior, empieza desde el interior".
Osho, El secreto de los secretos. Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada
http://osho-maestro.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario