Por el camino encontrarás multitud de personas frustradas, amargadas e impotentes porque consideran que nunca alcanzarán sus objetivos y no porque valgan menos que tú o yo, sino porque tienen miedo a fracasar o, directamente, no creen en ellos mismos.
Estas personas, consciente o inconscientemente, obstaculizarán la consecución de tus propias metas con los mismos argumentos que reducen su existencia al más absoluto conformismo.
Pero no permitas que nadie te diga lo que puedes conseguir y lo que no porqueel poder de uno es hacer algo, cualquier cosa, y reside en tu interior, en el espacio más recóndito de tu ser, donde sólo tú puedes acceder e influir para que tus deseos se conviertan en realidad.
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