LA DIOSA INTERIOR...

En todas las civilizaciones antiguas, han existido diosas, el culto a la mujer y a la femineidad era una constante, el matriarcado era la forma de vida y las mujeres eran consideradas sabias, las semillas de civilizaciones eran nómadas, los hombres se iban a cazar, a hacer la guerra con otros clanes y muchas veces no volvían; lo único estable en ese mundo eran las mujeres, la familia como tal aun no existía, la paternidad era algo poco claro…pero la maternidad siempre estaba establecida, la mujer era dadora y preservadora de la vida, paria, amamantaba, protegía, era sanadora, en fin era el centro d la comunidad.

Al cambiar las sociedades de nómadas a sedentarias el orden cambio, el hombre empezó a controlar todos los aspectos d la vida, se creo la sociedad patriarcal, la descendencia se marca por la línea paterna, la  propiedad privada, contraria a la comunal de la época matriarcal cambia toda la sociedad…y la mujer pasa a ser una posesión más…y la mujer olvida, olvida su poder, su lugar como única dadora de vida, olvida su sabiduría, su poder SU DIVINIDAD.

Pero esa diosa vive en el interior de cada mujer, allí está la guerrera, la sanadora, la reina, la dadora de vida, la sabia. Debemos recordar, debemos concientizar y recuperar nuestro poder, debemos creer en nuestra diosa interior.
Debemos saber que somos dueñas por igual de este mundo junto con el hombre, que en lugar de contrincantes somos compañeros, seamos feministas femeninas, compartamos este mundo con el hombre, de igual a igual, sin humillar y sin humillarnos, creemos relaciones de respeto y equilibrio con ellos, sean jefes, compañeros de trabajo, subalternos, padres hijos amigos, pareja.

Y también, eduquemos hijos que respeten y valoren a la mujer, hijas que sepan su valor y su poder, seres humanos que aprendan a compartir y disfrutar este mundo.

PSIC.MAGDALENA URBINA YUSSIM